Apoyo a Ejidos para Ordenamiento Territorial "México"

Acuerdo comunitario para ordenar la actividad forestal

Gonzalo Novelo Quijano
Entrevista
Subgerente operativo de la gerencia regional XII Península de Yucatán, Conafor

Renato Lechuga García

Gestor y Planificador Territorial

Este es un proceso en el que se invita a participar a la comunidad, como primer paso para encontrar la actividad productiva de mayor provecho

En Yucatán se trabaja para que los ejidos se reúnan para organizar sus terrenos y delimitarlos con el objetivo de conocer su potencial de uso, ya sea forestal, pecuario, urbano o agrícola, informa Gonzalo Novelo Quijano, subgerente operativo de la gerencia regional XII.

Lo que se pretende es que la comunidad participe en este proceso de ordenamiento territorial. Entre 2007 y 2008, la gerencia apoyó a seis ejidos, cuya superficie es de 63 mil 926 hectáreas, lo que equivaldría a ordenar 15 por ciento del municipio de Tekax, uno de los municipios con mayor cobertura forestal. Además, se efectuaron diez evaluaciones rurales participativas, donde cada ejido determinó cuál es la vocación de cada uno de sus terrenos.

Este año se ha aprobado el apoyo para cuatro ejidos con una superficie de 18 mil 605 hectáreas.

Gonzalo Novelo destacó que 46 ejidos en el estado tienen algún tipo de actividad forestal, como el aprovechamiento de madera, carbón o extracción de materia para postería. En la búsqueda por diversificar la producción, ya que los recursos forestales maderables no son abundantes en Yucatán, algunas comunidades han empleado sus terrenos para proyectos de turismo de naturaleza y de vida silvestre.

En el estado hay cinco cadenas productivas de turismo de naturaleza, integradas en su mayoría por cooperativas o sociedades de gente que vive en las áreas forestales, que han encontrado una forma de evitar que se degraden más terrenos y recuperar los dañados.

En el estado hay poco más de 700 ejidos constituidos. El 70 por ciento de ellos cuentan con terrenos forestales. A pesar de esto, su actividad económica se concentra en lo agropecuario. Se considera que los habitantes de áreas forestales utilizan los productos de la selva como de autoconsumo. Lo anterior se refleja en un aporte de menos del 1 por ciento del PIB del estado.